En todo el mundo los trabajadores se enfrentan a retos extremos de la represión del gobierno a la violencia de la policía, e incluso el asesinato y también en algunos países a ser despedidos, acosados por sus empleadores por defender sus derechos en el lugar de trabajo. El primero de mayo de este año la ICM expresa la solidaridad con todos aquellos que siguen luchando a pesar de aumentar la represión y no tener la oportunidad de tener una voz en el lugar de trabajo y en la comunidad.
En Qatar, miles de trabajadores migrantes no se les permite unirse a los sindicatos y cuando se organizan corren el riesgo de perder sus puestos de trabajo y ser deportados. Sindicalistas de Corea del Sur han sido encarcelados por luchar contra una nueva ley laboral regresiva. En Reino Unido y Finlandia, los derechos sindicales, incluyendo el derecho de huelga han sido atacados por los gobiernos y los empleadores.
El derecho a organizarse, a la negociación colectiva, huelga y de reunión pacífica son derechos fundamentales de acuerdo con los convenios de la OIT y de la ONU, pero estos derechos no pueden darse por garantizados. Los trabajadores en el pasado lucharon duro para estos derechos y hay que seguir en defensa de ellos todos los días.
Al mismo tiempo, las desigualdades globales están creciendo así como la voluntad de las grandes empresas en aumentar su poder a expensas de los trabajadores. El mundo necesita, más que nunca, un fuerte movimiento sindical mundial. Sin embargo, los gobiernos están intensificando su ataque contra los sindicatos mediante la introducción de una serie de leyes laborales que atentan contra los sindicatos.
Tenemos que ser solidarios también con aquellos que no tienen las mismas oportunidades de luchar por sus derechos. Cuando el nacionalismo oportunista y las fuerzas fascistas están aprovechando el creciente descontento de la sociedad, los sindicatos se movilizan lo que creemos --- la solidaridad, la justicia y la igualdad para todos.
En tiempos de creciente tasa de desempleo, la austeridad y el terrorismo, nunca hay que dejar que el miedo se haga cargo y hacernos engañar por aquellos que quieren poner a las personas, unas en contra de las otras, para servir a sus propios fines. Si no estamos unidos, no podemos ganar.En todo el mundo, afiliados de la ICM están de pie en contra de la discriminación, la explotación y la lucha por la justicia y la igualdad. En España e Italia los sindicatos se han unido al movimiento por los derechos de los migrantes y refugiados que huyen de la guerra, la pobreza y la represión a pesar del creciente sentimiento anti-migrante en el contexto de la crisis económica y la austeridad.
En los sindicatos de Sudáfrica ha sido sin descanso la lucha contra la xenofobia y la defensa de la diversidad entre los trabajadores. Los sindicatos de la región de Oriente Medio y el Norte de África, están defendiendo los derechos de refugiados al oponerse al acuerdo vergonzoso entre la Unión Europea y Turquía para devolver a los solicitantes de asilo que entran en las fronteras de la Unión Europea.
En América Latina, el Caribe y en Asia, los afiliados de la ICM están a la vanguardia en la organización de los trabajadores migrantes, no sólo para la defensa de sus derechos, sino en contribuir a la construcción de un movimiento sindical dinámico e inclusivo. En Qatar a pesar de los retos y dificultades que enfrentan los trabajadores, en efecto están organizándose para asegurarse de que sean tratados con respeto y dignidad.
Los sindicatos están demostrando que la verdadera solidaridad es la que construye poder, poder obrero y sindical a nivel nacional como a nivel mundial. Sólo unidos podemos ganar y tenemos todo que ganar, de luchar por aquellos que necesitan nuestra solidaridad al máximo.
Hoy debemos reforzar nuestro compromiso de luchar por los derechos laborales, los derechos humanos y la justicia social para todos los trabajadores. Sugerimos a todos a hablar contra el racismo, la xenofobia, la explotación y la represión sindical, y marchar por todos aquellos que no pueden asistir a una marcha el Primero de Mayo en la actualidad.¡Feliz 1° de mayo! .