13 March 2025
AL ASUMIR MALASIA LA PRESIDENCIA DE LA ASEAN EN 2025, AUMENTAN LOS LLAMADOS A UNA MAYOR COORDINACIÓN REGIONAL PARA PONER FIN A LA CRISIS DE MYANMAR
Kuala Lumpur, 25 de febrero de 2025 – Un Foro Público y una Ceremonia de Solidaridad se celebraron con éxito en el Salón de la Asamblea China de Kuala Lumpur y Selangor (KLSCAH) para conmemorar los cuatro años desde el golpe militar en Myanmar. Organizado por la Comisión de Derechos Humanos de Malasia (SUHAKAM), la Federación Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM), los Parlamentarios de la ASEAN por los Derechos Humanos (APHR), Amnistía Internacional Malasia y KLSCAH Youth, el evento reunió a más de 150 participantes, incluidos sindicatos, organizaciones de la sociedad civil, misiones diplomáticas, responsables políticos, activistas y miembros de la diáspora de Myanmar, con el fin de abogar por una mayor intervención internacional contra la junta militar. Tan Sri Othman Hashim, Enviado Especial de la Presidencia de la ASEAN para Myanmar, también asistió al foro.
Papel y responsabilidades de la ASEAN en la crisis
En su discurso de apertura, Dato' Seri Mohd Hishamudin Yunus, presidente de SUHAKAM, reconoció que el Consenso de Cinco Puntos de la ASEAN sigue siendo la principal referencia para abordar la crisis de Myanmar. Subrayó que los Estados miembros de la ASEAN no pueden permitirse ser meros espectadores, especialmente cuando se cometen crímenes contra la humanidad. Exhortó a asumir un papel más proactivo en la implementación de este consenso y destacó la importancia del liderazgo de Malasia dentro de la ASEAN para abordar la crisis actual. Además, reiteró el compromiso de SUHAKAM de trabajar junto con el gobierno de Malasia, las organizaciones de la sociedad civil y los socios internacionales para promover la protección de los derechos humanos y los derechos de los refugiados en la región.
Su Excelencia Edmund Bon Tai Soon, presidente de la AICHR y representante de Malasia, habló sobre los esfuerzos diplomáticos de la ASEAN y los desafíos que presenta la crisis en Myanmar. Destacó el papel del Enviado Especial de la ASEAN a Myanmar y la complejidad de lograr el consenso entre los Estados miembros. Subrayó la importancia de que la ASEAN se comprometa con todas las partes involucradas y de que se dé prioridad a la paz y estabilidad. También llamó la atención sobre cuestiones más amplias de derecho internacional, derechos humanos y desarrollo sostenible como marcos esenciales para resolver la crisis.
U Kyaw Ni, viceministro de Trabajo de la NUG, presentó una visión general del empeoramiento de la situación humanitaria en Myanmar. Condenó el simulacro de elecciones planeado por la Junta, al que calificó como una táctica para legitimar su gobierno, y detalló los crímenes de guerra en curso, el reclutamiento forzoso de civiles y los desplazamientos masivos que han devastado el país. Hizo un llamado a la comunidad internacional para que respalde la invocación del Artículo 33 de la OIT en relación con Myanmar y defienda la justicia para su pueblo.
El Foro resalta las voces del pueblo de Myanmar
Un panel compuesto por líderes en derechos humanos, representantes de refugiados y defensores de los derechos laborales compartió relatos de primera mano sobre el deterioro de la situación política y humanitaria en Myanmar. Ragunath Kesavan, comisario de SUHAKAM, instó a la ASEAN a adoptar una postura más firme contra la junta y a garantizar que se reconozca a los rohingya como parte de la futura solución política de Myanmar. Mahi Ramakrishnan, fundadora de Beyond Borders Malaysia, criticó la política de refugiados de Malasia, señalando que los refugiados deportados se enfrentan a menudo al reclutamiento militar forzoso o a ejecuciones extrajudiciales. Pidió a Malasia que ratificara la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 y adoptara medidas claras de protección para los solicitantes de asilo. Además, instó a la ASEAN a crear un mecanismo regional de protección para las supervivientes de la violencia sexual relacionada con los conflictos, en el marco de su programa Mujeres, Paz y Seguridad.
James Bawi Thang Bik, presidente de la Alianza de Refugiados Chin, habló sobre la persecución que sufre la comunidad chin y el empeoramiento de las condiciones de las minorías étnicas desplazadas. Pidió una mayor intervención internacional y apoyo para los refugiados. Htoi San Nhkum, representante de la Comunidad de Refugiados Kachin, destacó los graves problemas que enfrentan las mujeres y niños desplazados, como el acceso limitado a la educación, atención sanitaria y oportunidades económicas. Instó a Malasia y a la ASEAN a implementar políticas concretas de apoyo a los refugiados. Rahmat Abdul Karim, presidente de la Sociedad Rohingya de Malasia, condenó el genocidio en curso contra el pueblo rohingya y criticó la reticencia de la ASEAN a actuar. Pidió a los Estados miembros de la ASEAN que rompieran sus lazos diplomáticos con la junta y reconocieran formalmente los derechos de los rohingya.
Los discursos de solidaridad exigen medidas urgentes
Kelvin Lee, jefe de la Juventud de KLSCAH, denunció la falta de acción decisiva de la ASEAN contra la junta y pidió un esfuerzo unificado para cortar el apoyo económico y diplomático al régimen militar. También abogó por que la ayuda humanitaria directa se entregue a través de redes de confianza de la sociedad civil, en lugar de utilizar el sistema controlado por la junta. Nicole Fong, responsable de investigación y promoción de Amnistía Internacional Malasia, pidió una mayor rendición de cuentas y acciones legales contra los dirigentes militares de Myanmar. Instó a los países de la ASEAN y a los organismos internacionales a detener el suministro de armas y combustible a la junta para evitar nuevas atrocidades contra la población civil.
Wong Yan Ke, responsable de la Campaña Regional de la ICM para Asia y el Pacífico, esbozó las medidas que debe adoptar el movimiento sindical internacional. Pidió el apoyo masivo a la Resolución sobre Myanmar en virtud del artículo 33 de la Constitución de la OIT para intensificar la presión sobre los militares de Myanmar a través de los mecanismos internacionales del trabajo. Subrayó la necesidad de rechazar las elecciones fraudulentas de la Junta y abogó por la suspensión de la Comisión de Derechos Humanos de Myanmar de la SEANF debido a su incapacidad para proteger los derechos humanos. También habló de la importancia de oponerse a los sindicatos controlados por la junta, que socavan el sindicalismo independiente en Myanmar. Por último, insistió en la necesidad de mantener los Fondos de Solidaridad Internacional para apoyar a los trabajadores y movimientos de resistencia de Myanmar.
Ceremonia de solidaridad: Actos simbólicos de resistencia
El evento concluyó con una ceremonia de solidaridad, que incluyó: (i) la Acción Solidaria "Avión de Papel", en la que los participantes escribieron mensajes a la comunidad internacional pidiendo sanciones reales y el fin del comercio de combustible con la junta; (ii) un espectáculo de danza de resistencia a cargo de jóvenes kachin, símbolo de la esperanza y resistencia en la lucha prodemocrática de Myanmar, y (iii) el batir de cacerolas, un acto tradicional de resistencia civil en Myanmar, que simboliza la exigencia popular de expulsar a la dictadura militar.
Es necesaria una mayor movilización regional
El foro concluyó con un enérgico llamamiento a la ASEAN para que tome medidas decisivas, instando a la imposición de sanciones económicas y a la ruptura de relaciones diplomáticas con la junta. Los participantes insistieron en la necesidad de un mayor compromiso de la ASEAN con la sociedad civil de Myanmar, de ampliar la ayuda humanitaria y de mejorar la protección de los refugiados en la región. Los oradores también abogaron por el procesamiento de los líderes militares de Myanmar en tribunales internacionales. El acto reforzó la solidaridad mundial en la lucha contra el régimen militar y subrayó la urgente necesidad de que la ASEAN y la comunidad internacional vayan más allá de la retórica y adopten medidas significativas. Los participantes reafirmaron su compromiso de apoyar al pueblo de Myanmar hasta que se restablezca la democracia.