El 11 de septiembre, las autoridades bielorrusas liberaron a 52 presos políticos, entre ellos dos destacados líderes sindicales: Alexandr Yaroshuk, presidente de la Confederación Sindical Independiente de Bielorrusia (BKDP), y Gennadiy Fedinich, presidente del sindicato REP.

Yaroshuk fue condenado por el Tribunal Municipal de Minsk en diciembre de 2022 a cuatro años de prisión en virtud del artículo 342 del Código Penal («acciones colectivas que violan el orden público») y del artículo 361 («llamamientos a la aplicación de sanciones»).

Fedinich se enfrentó a una pena aún más severa. En 2023, fue condenado a nueve años de prisión en virtud del artículo 361 («llamamientos a acciones contra la seguridad nacional»), el artículo 361-1 («creación de un grupo extremista») y el artículo 130 («incitación al odio»).

A pesar de su liberación, el Gobierno bielorruso obligó a los excarcelados a abandonar el país. Todos fueron trasladados a Letonia, aunque algunos se negaron a partir voluntariamente.

Genevieve Kalina, representante regional de la ICM en Europa, acogió con satisfacción la liberación, pero subrayó que la lucha continúa:

«Desde 2022, la ICM se ha sumado al movimiento sindical mundial en la campaña por la libertad de asociación en Bielorrusia y la liberación de todos los sindicalistas encarcelados en el país. Celebramos la liberación de dos líderes sindicales, pero seguiremos con la campaña, ya que 20 sindicalistas siguen en prisión y la libertad de asociación no se respeta en Bielorrusia».